El buen futuro se planea.

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Autor:
Lic. Eduardo Holguín Zehfuss - 07/08/2017
ExDirector IMPLAN Torreón.
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Al construir el Índice de Ciudades Prósperas (CPI, por sus siglas en inglés) ONU-Hábitat NO tiene como objetivo reprobar o aprobar a una comunidad y/o a su gobierno, tampoco es posicionar a las ciudades en un ranking nacional o internacional. Así lo declaró, al inicio de la presentación de CPI Torreón, en la Séptima Sesión del Consejo del IMPLAN, Luis Carlos Herrera, funcionario de ONU-Hábitat México.

El objetivo del prestigiado organismo multilateral es contribuir a la medición y debate de las condiciones que impulsan o frenan la prosperidad urbana. Los resultados expuestos en el informe de esta medición científica, son fundamentales para el diseño de políticas públicas que contribuyan a construir el buen futuro de una ciudad, donde los ciudadanos satisfagan sus necesidades básicas, gocen de los servicios públicos esenciales y accedan, equitativamente, a oportunidades y condiciones de bienestar –definición implícita de prosperidad–.

De acuerdo a ONU-Hábitat el CPI de Torreón es moderadamente débil (en una escala de 1 a 100 obtuvo una calificación de 55.51), ello a pesar de que en varias de las sub dimensiones, consideradas por el organismo internacional en referencia, nuestra ciudad se sitúa en una escala moderadamente sólida; por ejemplo, en: educación (86.77), salud (63.75), inclusión social (74.06), inclusión de género (88.45), manejo de residuos (75.39). La razón principalísima por la cual el puntaje promedio de Torreón es moderadamente débil es por la alta ponderación que ONU-Hábitat le concede a la sub-dimensión "gobernanza de la urbanización", donde obtuvimos un puntaje de 0.

Esta mala calificación hace referencia a los desequilibrios urbanos generados por un crecimiento desproporcionado de la mancha urbana en relación al crecimiento de la población, fenómeno que corre paralelo a una significativa pérdida de densidad urbana y al incremento acelerado y disforme del parque vehicular.

Del 2000 al 2010, el número de habitantes por hectárea andaba alrededor de 87 personas por hectárea, ahora no rebasamos los 77, a pesar de que ONU-Hábitat recomienda un estándar de 150 habitantes por hectárea. Mientras el Centro Histórico se vacía, el norte y el oriente crecen sin control, mientras las colonias de dichos polígonos urbanos son preferidas por los jóvenes, Ampliación Los Ángeles, La Rosita, Torreón Jardín y el Centro Histórico concentran a la población adulta.

Correlacionado a lo anterior (por el modelo de ciudad que hemos promovido) se observa que en Torreón hay 1 vehículo por cada 5 habitantes, y, en caso de que la tendencia no se corrija, en 10 años tendremos 1 vehículo por cada 2 habitantes, con las consecuencias que ello implica en términos de contaminación, "chatarrización" e invasión de los espacios públicos por parte del automóvil.

Dos preguntas: ¿soportaremos el costo de una municipalidad que tiene que dar mantenimiento y servicios públicos a polígonos urbanos vacíos y que está obligada a dotar de infraestructura a otros polígonos que crecen sin control? ¿Qué vamos a hacer con un parque vehicular de 500 mil automóviles?

Es ocioso el reducir el diagnóstico de los fenómenos estructurales que aquejan a nuestra ciudad a debatir si nos reprobaron o nos a probaron. Las mediciones de ONU-Hábitat, así como las del IMCO, del CIDE, del CIDAC, del IMPLAN Torreón, tienen como intención el incentivar a la ciudadanía y a los gobiernos a poner en marcha acciones, estrategias y políticas públicas que incrementen los indicadores de prosperidad, de bienestar y de competitividad regionales.

Hagamos a la ciudad más caminable, sustentable, amigable a las personas con discapacidad, equitativa en términos de oportunidades y de género. Invirtamos fuerte en transporte público, incentivemos fiscalmente la re densificación, construyamos eficientes y verdaderas ciclo vías, diseñemos, en gobernanza, un nuevo, vanguardista y funcional modelo de ciudad.

"El futuro no tiene culpables, no se enjuicia, no se reprueba o aprueba. El futuro se prevé y el buen futuro se planea, se construye con acertadas y oportunas decisiones presentes."

Esa es la filosofía que guía el trabajo del Consejo y de los funcionarios del IMPLAN, Torreón.