En el 2015, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) publicó su Quinto Reporte de Evaluación en donde se concluyó que el calentamiento del planeta es incuestionable. Al mismo tiempo, se afirma que los fenómenos como el calentamiento de la atmósfera y los océanos, la reducción de las superficies cubiertas con hielo y nieve, y el aumento del nivel del mar observados en las últimas décadas no se habían presentado en varios cientos de miles de años, apuntando como causante de los mismos a las actividades humanas. Además, el IPCC ha identificado el aumento de 1.5 °C como un punto de inflexión clave para reducir los impactos en los ecosistemas, la salud humana y el bienestar. Para el caso de México, existen condiciones de alta vulnerabilidad al cambio climático debido a sus características geográficas como su latitud, relieve y por estar ubicado entre el Océano Pacífico y el Golfo de México, lo cual provoca que todos los años sea impactado por diferentes fenómenos hidrometeorológicos de gran intensidad. Los análisis desarrollados para el país proyectan que los impactos del cambio climático se distribuirán de manera desigual. Esto puede deberse a la existencia de distintos tipos de clima, distribución de los recursos naturales, desarrollo económico y a la concentración de la población. En lo que se refiere a los cinco municipios que conforman la Zona Metropolitana de La Laguna (ZML), el Atlas Nacional de Vulnerabilidad al Cambio Climático (ANVCC), publicado en el 2019 por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), los sitúa como uno de los 1,448 municipios del país vulnerables a los efectos del cambio climático. Además, el mismo documento coloca a Torreón en el nivel más elevado como uno de los 83 municipios con mayor número de vulnerabilidades en todo México. Proyecciones de cambio climático realizadas para la ZML estiman, para un escenario en donde existe una disminución importante de emisiones a la atmósfera (SSP1 RCP 2.6), un aumento de la temperatura media que va de 1°C a 1.5°C y una ligera caída en la precipitación de 1%. Sin embargo, bajo un escenario en el cual no se tomen medidas al respecto (SSP5 RCP 8.5), se espera un incremento de la temperatura media mayor a 5°C y una importante caída del 8% en la precipitación. Aunado a lo anterior, uno de los posibles efectos del cambio climático es el aumento de la frecuencia, duración y severidad de las sequías. En este sentido, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) ha clasificado a la ZML con un alto grado de peligro por sequía. Por último, en el Índice de Ciudades Sostenibles, el cual mide el avance de las zonas metropolitanas mexicanas hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y que es elaborado por distintas instituciones de prestigio a nivel nacional, se ubica a la ZML en el Objetivo 13 “Acción por el Clima” con un valor bajo de 36.7 sobre 100. Conocer este tipo de información de cada municipio en la ZML es el primer paso para tomar medidas de adaptación e incrementar la resiliencia frente al cambio climático. En ese sentido, el IMPLAN Torreón, dentro de su Política de Medio Ambiente, ha desarrollado el Plan de Infraestructura Verde, el Manual y Lineamientos para la Aplicación de Infraestructura Verde, la Norma Técnica de Infraestructura Verde y el Plan de Movilidad Activa los cuales son instrumentos que buscan mitigar los efectos adversos del cambio climático y reducir las emisiones de gases y compuestos de efecto invernadero en Torreón.
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