"Por otro lado, el modelo de economía lineal promueve el consumo constante de bienes de vida útil de corto plazo, se basa en el esquema de extracción, producción, consumo y disposición final. Lo que sin duda es insostenible a largo plazo. En cambio, el modelo circular fomenta en su disposición final la continuidad de los bienes dándoles una segunda vida útil, incluso más. Empresas instaladas en el país están trabajando y promoviendo la economía circular. Como son: Tetra Pak, TeleVía, Danone, PetStar, Heineken México, Natura, Bonafont y General Motors. Este sector, es uno de más importantes para dar impulso a la economía circular, debido a que es uno de los que más recursos naturales utiliza y de los que más desechos genera. Hasta hace unos años el modelo de generación y gestión de residuos era totalmente lineal, los Residuos de Construcción y Demolición en México (RCD) se depositaban en un solo contenedor y se trasladaban a un vertedero y ahí terminaba su vida útil. Debido a la gran generación de residuos en las obras, fue necesario la separación de específicos desechos con el objetivo de su entrega a un reciclador o proceso de segunda vida útil, como es el caso de hace más de una década en España con el Real Decreto 105/2008, el cual regula la producción y gestión de los RCD. De esta manera, en las obras es obligatorio separar la fracción pétrea (concreto ladrillo, tejas, yeso, baldosas), plástico, madera, acero, vidrio, papel y cartón; para que sea posible la reutilización de estos materiales en nuevas obras, disminuyendo los residuos. El escenario estimado por la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), registra una generación estimada de residuos de 11.67 millones de toneladas en el 2022 (32,450 ton/día aproximadamente), tomando en cuenta un crecimiento del 5% promedio anual en la industria de la construcción. Para la estimación de la generación de RCD, se empleó un algoritmo que relaciona la superficie construida, con un volumen de generación por unidad, a partir de observaciones de campo. En la actualidad, la fundación Ellen MacArthur que tiene la misión de “acelerar la transición a una economía circular”, contempla en aprovechar al máximo el valor de los materiales utilizados. Creó su fundación en el año 2010 y ha firmado acuerdos con grandes multinacionales como Google y otros socios globales como H&M, Nike, Philips y Renault.
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